El verano, aunque a menudo esperado por su clima cálido y días largos, puede traer consigo un invitado no deseado: la retención de líquidos. Esta condición puede manifestarse a través de una sensación molesta de hinchazón, junto con síntomas como aumento de peso inexplicado, piel tensa, párpados hinchados, rigidez articular, hinchazón en dedos, muñecas y tobillos, piel que se hunde al apretarla y disminución de la orina.
¿Por qué ocurre esto más durante el verano? La respuesta radica en la vasodilatación de los vasos periféricos debido al aumento de la temperatura ambiente. Este proceso facilita la filtración de líquidos desde los vasos sanguíneos hacia otros tejidos, generando así la retención de líquidos.
No obstante, hay buenas noticias. Existen estrategias efectivas para evitar y mejorar esta situación. Aquí te presentamos algunos consejos clave que te ayudarán a combatir la retención de líquidos en verano:
- Mantén una hidratación adecuada: Es fundamental beber suficiente agua para mantenernos hidratados y prevenir la retención de líquidos. Recuerda también consumir alimentos ricos en agua para evitar la deshidratación.
- Incluye verduras, frutas y hortalizas en tu dieta: Estos alimentos, ricos en agua y nutrientes, contribuyen a mejorar la diuresis, evitando así la retención.
- Practica ejercicio físico: El movimiento favorece la circulación y reduce la retención de líquidos. En verano, puedes aprovechar para realizar actividades acuáticas, las cuales estimulan la circulación de forma eficiente.
- Reduce el consumo de sal: La sal favorece la retención de líquidos, por lo que es importante moderar su consumo, especialmente en verano. Opta por condimentar tus platos con hierbas y especias en lugar de sal.
- Consume alimentos ricos en potasio y magnesio: Estos nutrientes son aliados poderosos para reducir la retención de líquidos. Puedes encontrarlos en alimentos como aguacate, legumbres, pepino, espinacas, tomate, alcachofa, brócoli y especias.
- Limita la ingesta de alimentos procesados: Estos productos suelen contener altos niveles de azúcar y sal, que pueden aumentar la retención de líquidos. Opta por alimentos frescos y naturales en su lugar.
- Incorpora actividades de relajación en tu rutina: El estrés puede contribuir a la retención de líquidos. Técnicas de relajación como el yoga, la meditación o la respiración profunda pueden ayudarte a reducir el estrés y mejorar la circulación.
- Eleva las piernas: Si pasas mucho tiempo de pie o sentado, es recomendable elevar las piernas para favorecer el retorno venoso y prevenir la hinchazón.
- Evita el calor excesivo: Procura evitar la exposición prolongada al sol y busca lugares frescos o con aire acondicionado. Además, utiliza ropa ligera y transpirable que facilite la evaporación del sudor.
La retención de líquidos durante el verano puede resultar molesta, pero siguiendo estas pautas y adoptando hábitos saludables, es posible reducir la sensación de hinchazón y mejorar tu bienestar.
Si los síntomas persisten, no dudes en consultar a tu médico para recibir un diagnóstico y tratamiento adecuados. ¡Disfruta del verano con una sensación de ligereza y bienestar!