El cambio de hora puede provocar somnolencia, irritabilidad y falta de atención.
El cambio de hora está a punto de producirse. En tan sólo unos días, en concreto, este próximo domingo, las manecillas del reloj se retrasarán una hora por lo que cuando marquen las 3 de la mañana, en realidad, serán las 2.
Pero, este cambio… ¿puede afectar a la salud? ¡¡Descúbrelo en las siguientes líneas!!
Somnolencia, irritabilidad, falta de atención y hasta cansancio son sólo algunos de los síntomas que tendrán gran parte de la población durante los próximos días al cambio de hora.
A pesar de que, en principio, podemos interpretar que una hora más de sueño puede ser beneficio para nuestra salud, cierto es que nuestro cuerpo realiza un esfuerzo extra para sincronizar lo que se conoce como reloj biológico y esto puede provocar problemas muy similares a los que genera el ‘jet lag’.
¿Qué consecuencias puede provocar a nuestra salud?
Además de los descritos anteriormente y, solamente en el caso que este cambio de hora pueda provocar una disminución en las horas de sueño, pueden aparecer otros síntomas como, por ejemplo, aumento de la tensión arterial o la frecuencia cardíaca.
¿Puede afectar a nuestro trabajo?
Desde luego que sí, el cambio de hora puede provocar, además de la imposibilidad para concentrarse en las tareas laborales, ciertos ‘roces’ con los compañeros debido a la irritabilidad y el cambio en el estado anímico.
¿Cuánto pueden durar los efectos?
Está claro que cuanto más ordenado sea la persona en cuanto al sueño y a las comidas, menos le costará habituar su cuerpo a este cambio horario.
¿Cómo luchar contra los síntomas?
Es importante que desde ya y, antes que se produzca el cambio horario, se retrasen actividades rutinarias como, por ejemplo, pueden ser las comidas e, incluso, la hora de dormir. 10 ó 15 minutos será tiempo suficiente para que el cambio no nos afecte tanto.